Del Potro a semis de los JJOO

Juan Martín Del Potro hace historia en el tenis olímpico argentino. El tandilense consiguió lo que ningún otro singlista nacional había logrado: se metió en una semifinal de un Juego Olímpico. Antes, lo mejor había sido los cuartos de final de Martín Jaite, el actual capitán del equipo en Londres 2012, en Seúl 88, hace 24 años, cuando Delpo estaba llegando a este mundo.

Un rival conocido debía sobrepasar Juan Martín Del Potro para meterse en las semifinales y acercarse en la lucha por una medalla. Enfrente estaba el japonés Kei Nishikori, a quien había vencido en este mismo club donde ahora se realiza el torneo de tenis de los Juegos Olímpicos, el All England Club, hace menos de un mes, en los octavos de final de Wimbledon. Y repitió el buen resultado: fue 6-4 y 7-6 (4) en casi dos horas de juego, para festejar con las manos en alto.

Del Potro encontró rápidamente el quiebre en el segundo game para ponerse 2-0. Sin embargo, el número 17 del mundo complicó lo que parecía un trámite más sencillo. Nishikori recuperó el quiebre e igualó el match en dos juegos por lado. Pese a eso, en el octavo, el tandilense consiguió quedarse otra vez con el servicio del nipón, en la segunda chance de quiebre, para el 5-3.

Sin embargo, no pudo cerrarlo en el servicio. Un punto al parecer largo de Nishikori que la gente gritó, siguió con un error no forzado de Del Potro que determinó el quiebre de su saque y el enojo del argentino para con los jueces. Hubo revancha en el siguiente game: Delpo se puso 40-15 y remató al japonesa para quedarse con el primer set por 6-4.

En el segundo, el número 9 del mundo y primera raqueta argentina comenzó a sacar grandes diferencias y, con un quiebre, se puso enseguida 3 a 0, demostrando la diferencia del tenis de ambos. El japonés no volvió a perder el servicio y hasta se quedó con el de Delpo en la última de las tres chances que tuvo cuando el argentino sacaba para partido. Luego, confirmó (5-5), ambos conservaron sus saques y la definición se estiró al tie break. Allí, el tandilense no se equivocó y con un 7-4 se quedó con el partido.
Su próximo rival será el suizo Roger Federer, quien venció por 7-5 y 7-6 (7-5) al estadounidense John Isner. Un escollo durísimo, pero acorde a la gran instancia a la que arribó Del Potro.