Cilic terminó con la ilusión de Del Potro en Australia

El tandilense perdió por 5-7, 6-4, 7-5, 5-7 y 6-3 y se despidió en los octavos de final del Grand Slam luego de más de cuatro horas y media de encuentro. El croata espera por Andy Roddick o Fernando González. Juan Martín del Potro se despidió en los octavos de final del Abierto de Australia y con él se fue la última esperanza de los argentinos en el primer Grand Slam de la temporada. El tandilense luchó hasta la última pelota pero cayó frente al croata Marin Cilic por 5-7, 6-4, 7-5, 5-7 y 6-3, tras cuatro horas y 38 minutos de partido. El set inicial fue muy parejo y los dos se hicieron fuertes a partir de un buen porcentaje de primeros servicios. Los puntos, generalmente, eran cortos y ambos aprovechaban al máximo cada pelota sin profundidad. En el noveno game, el tandilense llegó a estar 15-30 con el saque del croata y en el undécimo consiguió el quiebre en la única chance de break que se generó en el set. Del Potro lo cerró con su saque y un ace. Del Potro perdió un segundo parcial en el que siempre pareció estar más cerca de quedárselo. Cilic bajó el porcentaje de primeros saques, elevó los errores no forzados pero zafó las dos veces en las que afrontó posibilidades de quiebre, en el tercer y séptimo game; y, en el décimo, aprovechó un pequeño bajón del argentino, se quedó con su saque en la primera chance que tuvo en todo el partido y emparejó las acciones. Cilic creció en el tercero y empezó a dominar las acciones a partir de su derecha. Del Potro, fastidioso por una molestia en el pie izquierdo, perdió precisión y aceleración en sus golpes, y le costaba trasladarse hacia los costados. Su virtud fue mantener en partido tras levantar siete breaks (tres en el segundo juego, uno en el cuarto y tres en el octavo). Todo dependía del europeo, quien se equivocó más de la cuenta en el noveno juego y le dio la posibilidad al tandilense de sacar para llevarse el set. No lo pudo cerrar, volvió a ceder su servicio en el duodécimo luego de desperdiciar dos chances para quebrar en el undécimo y el tanteador se daba vuelta. La garra mantuvo en juego a un Del Potro visiblemente más cansado que su rival. Con un soberbio passing logró salvar el segundo de los dos breaks en contra que sufrió en el sexto game y al juego siguiente fue él quien no logró aprovechar su oportunidad. Llegaron al 5-5 y el tandilense encontró sus mejores golpes: quebró, mantuvo su saque y se iban al quinto. El set ganado le dio otro ánimo a Juan Martín, pero no otro físico. Zafó que le quebraran el saque en el segundo juego aunque no pudo en el cuarto. Tuvo la chance de recuperarlo dos veces en el noveno game, se le escaparon y también el encuentro.