Nalbandian no pudo con un Federer imparable

El jugador de Unquillo opuso lucha en el primer set. Después, el 1 del mundo fue incontenible. El suizo definirá el título con el chileno González. No hubo equivalencias, pese a que, en la previa, el historial entre ambos marcaba seis victorias para cada uno. No hubo equivalencias, claro que no. No las hubo porque uno, Roger Federer, jugó su mejor partido en el torneo; no las hubo porque el otro, David Nalbandian, rindió por debajo de su nivel y sintió el desgaste físico que realizó en sus anteriores presentaciones (en Madrid, ganó todos sus partidos en tres sets). No hubo equivalencias, también, porque el argentino, quien acumuló esta semana varios puntos pensando en el Masters de Shanghai, chocó frente a la precisión y categoría de un Federer que, fiel a su costumbre, no suele perdonar errores ajenos. Ayer no fue la excepción, claro, y, en una de las semifinales del Masters Series de Madrid (2.082.500 de euros en premios), el suizo estuvo imparable: le bastaron sólo 58 minutos para barrer al unquillense 6-4 y 6-0. Así, el número 1 del mundo accedió a una nueva final y enfrentará hoy al chileno Fernando González, buscando su primer título en España. Es cierto que los primeros games del partido mostraron una gran paridad, tan cierto como que el juego de Nalbandian se derrumbó rápidamente como un castillo de naipes ante el primer contacto. En el primer set, el mejor tenista de la actualidad quebró en el cuarto juego y tomó ventaja 3 a 1. Parecía que lo ganaría sin problemas, aunque el cordobés, acostumbrado a revertir rachas adversas, reaccionó y logró quebrar el séptimo game para emparejar el juego. Eso sí, poco le duró la alegría: el oportunismo de su rival para volver a quebrarle le borró la leve sonrisa que habían esbozado sus labios. El segundo set se pareció poco al primero. Muy poco: fue un monólogo de Federer, una verdadera exhibición del mejor tenis. El argentino, quien volvió a estar flojo con su servicio, tuvo esa impotencia que conduce hacia la desesperanza y no pudo hacer nada ante la magnífica derecha y el excelente saque de su rival. Ahora bien, no todas son malas para Nalbandian, quien volverá a ser 3 del mundo y cada vez está más cerca (figura 6ª en la Carrera de Campeones) de conseguir uno de sus grandes objetivos en este fin de año: clasificar al Masters de Shanghai para defender el título logrado en 2005. Qué se dijo Nalbandian. "Fue un partido duro. El siempre juega muy bien y yo llegué cansado después de haber disputado tres encuentros a tres sets. El aprovechó mi cansancio y a mí me costó encontrarle la vuelta a su juego". Federer. "Estoy muy contento por cómo jugué. Lo hice muy agresivo y serví muy bien, variando el saque cada tanto. El segundo set fue fenomenal porque empecé a golpear más libre. Físicamente me encuentro muy bien".