El arranque de la Copa Davis 2013 le hizo un
guiño al equipo argentino. Carlos Berlocq tenía un compromiso más que
complicado ante el alemán Philip Kohlschreiber y cuando la batalla ya
había pasado la cuarta hora el alemán dijo basta. Una lesión, en el
quinto set, cuando estaban 3-6, 7-5, 2-6, 6-4 y 4-5 (40-0), le dio al
representativo nacional el primer punto.
La derecha de Kohlschreiber se quedó en la red y así arrancó
la mañana. Luego, los errores no forzados de Berlocq provocaron el primer
quiebre. El argentino, apoyado en su saque para poder ganar sus games, no podía
con la velocidad del alemán y tampoco molestarlo con cambios ritmos. Tuvo la
chance de equilibrar el parcial en el cuarto juego, pero tiró una devolución sencilla
afuera, y en el noveno se cerró el parcial con un revés paralelo.
Lo que insinuó en algunos pasajes del primer set, el de Chascomús logró
sostenerlo en el tiempo en el segundo. Mantuvo el porcentaje de primeros saques
aunque obtuvo más puntos cada vez que lo metió, y bajó los errores no forzados.
Los dos ganaron sus servicios sin demasiada complicación... hasta el undécimo.
Berlocq quebró, no falló con su saque y provocó la primera gran ovación en
Parque Roca.
El 19º del mundo volvió a golpear
de entrada en el tercero, pero el argentino respondió en el quinto y
puso el 2-3. Sin embargo, en el sexto, después de levantar cuatro break
points (un drop, saque ganador y dos derechas), Charly volvió a perder
su servicio y desperdició en el séptimo dos oportunidades para volver a
emparejar el desarrollo. Ese pasaje fue clave. Llegó otro quiebre en el
octavo. Al cuarto, sin margen de error...
Berlocq
salvó en el segundo juego un break que pudo haber significado mucho
más. También desperdició una chance en el tercero, pero se mostraba
sólido con su saque (16-17 cuando metió el primero) y a su habitual
entrega lograba agregarle tiros ganadores. El argentino empezó a
encontrar las líneas y buenos ángulos, quebró en el séptimo y tuvo
cuatro set points en el noveno (en los primeros dos pudo hacer poco, en
el tercero tiró una devolución de segundo saque afuera y en el otro se
le fue larga después de un largo peloteo). Sacaba en el décimo con el
interrogante de saber si podía sentir esas pelotas perdidas y la
presión, pero lejos estuvo de flaquear: ganó en cero su saque. Al
quinto.
Berlocq salvó con un buen ataque un
break en el cuarto juego y llegaron al dramático octavo. Doble falta,
derecha larga y 0-30. Drop, Kohlschreiber llegó y la tiró afuera. Solo.
Pero perdió más que un punto clave, se lesionó en el esfuerzo. Volvió
como pudo. Incluso aprovechó los nervios de Charly para casi quebrar y
sostener con claridad su saque pese a que no podía mover. Hasta que
cuando 4-5 y el argentino sacaba 40-0, dijo basta. Para hoy y,
posiblemente, para el resto de la serie.
A continuación, Juan Mónaco, la mejor raqueta nacional
para este duelo ante la ausencia de Juan Martín Del Potro, se medirá con Florian
Mayer en el segundo choque de la eliminatoria. El equipo conducido por Martín
Jaite se iría conforme con una igualdad en la primera jornada.
El sábado, desde las 13, se jugará el punto de dobles con
Horacio Zeballos y David Nalbandian ante Tobías Kamke y Christopher Kas. Y el
domingo terminará la serie con los otros cruces de singles: Berlocq ante Mayer
y Mónaco frente a Kohlschreiber.
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