4.6.06

Nalbandian es el único argentino que sigue en carrera en Roland Garros

El cordobés derrotó a su compatriota Martín Vasallo Argüello por un triple 6-4. Ahora se enfrentará al ruso Nikolay Davydenko, que eliminó a Gaudio. Mónaco tampoco pudo con el croata Ljubicic. Las frases del tenista de Temperley que se oyeron en la cancha El tenista cordobés David Nalbandian es el único argentino con vida en Roland Garros, luego de la victoria que consigiuó ante su compatriota Martín Vasallo Argüello en los octavos de final del Grand Slam francés, del que hoy tambiuén se despidieron Gastón Gaudio y Juan Mónaco. A diferencia de lo mostrado en partidos anteroires, Nalbandian, número tres del mundo, fue mucho más regular esta vez, virtud que le permitió llevarse el partido por idénticos parciales: 6-4. Luego de empezar con algunas dudas y pese a perder un saque, el tenista de Unqiullo logró dos break para quedarse con el primer set. Ya el segundo se presentó más favorable desde el inicio, cuando quebró el servicio de su compatroita en el primer game. En el tercero sólo quedó lugar para que el cordobés cerrara el partido. Pese a la derrota, la actuación de Vassallo Argüello, la gran sorpresa del torneo, fue muy meritoria, y si bien jamás pudo doblegar el juego de su compatriota, dio pelea hasta el final, a tal punto que se retiró de la cancha con un brazo ensangrentado. Ahora, Nalbandian se enfrentará en los cuartos de final del Grand Slam francés con el ruso Nikolay Davydenko, precisamente el verdugo de Gaudio en la jornada de hoy. Dos afuera Con una afición entregada desde el primer punto, Gastón Gaudio se vio incapaz de darle continuidad a su juego y cayó fulminado 6-3, 6-4, 3-6, 6-3 ante el ruso Nikolay Davydenko en octavos de final del Abierto de Francia. "El (Davydenko) jugó mucho mejor que yo. Mereció ganar, pero termino con bronca... Tuve un par de chances", dijo Gaudio. Las rápidas piernas de Davydenko (6to preclasificado) cubrieron toda la cancha en forma impecable, desesperando a su rival en numerosos momentos, que sólo dio muestras de su exquisito tenis en el tercer set y en ciertos episodios del cuarto. "Estoy muy lento, muy lento", se quejaba Gaudio (10) en el segundo set. Y es que el campeón del Roland Garros del 2004 no llegaba a los golpes de Davydenko, que por primera vez le gana al argentino en tierra batida, tras cinco derrotas. "¡Vamos, vamos, Argentina! ¡Vamos, vamos, a ganar!", le cantaban a Gaudio decenas de argentinos cuando peor lo estaba pasando su tenista. La gran mayoría del público estaba volcado con el sudamericano y trató de empujarlo con cánticos, ánimos y aplausos. Estos parecieron dar fruto en el tercer set, pero los altibajos se volvieron a apoderar de Gaudio en el cuarto. "No tengo ganas", dijo el argentino desesperado al iniciarse el tercer set, en el que no halló motivación suficiente para darle la vuelta al partido, pese a ganarlo 6-3 y empezar el cuarto rompiendo el saque de Davydenko. Durante ciertos episodios del encuentro, Gaudio perdió los nervios, tiró la raqueta al suelo o golpeó con dureza la pelota después de perder un punto. "¡Qué error!, ¡Que bola de perdedor!", se recriminó en una ocasión. El argentino tuvo momentos de buen juego, pero no supo continuarlo para desmontar a Davydenko. Gaudio tampoco supo aprovechar break points en momentos clave, ni explotar los fallos que iba cometiendo su rival a medida que avanzaba el partido. "Sin ganar un servicio en el cuarto set, así no se puede ganar un partido", dijo Gaudio, que anunció su vuelta a Buenos Aires "hoy (domingo)". En un partido por la mañana, Juan Mónaco quedó eliminado de la tercera ronda al perder 4-6, 5-7, 6-3, 6-4, 6-2 ante el croata Ivan Ljubicic, en un partido que comenzó en la víspera y fue suspendido por falta de luz. "Era tan grande la desilusión de ayer (iba dos sets por encima) que hoy no pude jugar. Este partido lo perdí ayer", explicó Mónaco. En apenas 10 minutos, Ljubicic (4to preclasificado) ganó los dos games que necesitaba para pasar a la siguiente ronda, en la que lo espera el español Rubén Ramírez Hidalgo. "¡Todas fuera!, ¡todas fuera!", gritó Mónaco ante de darle una patada de rabia al suelo al perder un punto. Y es que el argentino salió desconectado, sin mostrar el tenis agresivo que desplegó el sábado, cuando tuvo al croata contra las cuerdas. Mónaco, número 103 del mundo, regresa a Argentina "tranquilo", sabiendo que su gira en Europa terminó mejor de lo que comenzó.

No hay comentarios.: