Clavó un 6-2, 5-7 y 6-0 inapelable ante el 18º ATP. A los 18 años es una realidad. Va contra Youzhny y puede jugar con Nadal en octavos.
Era cuestión de días, incluso de horas. Algún grosso iba a caer volteado por Juan Martín del Potro, el pequeño gigante que reúne todas las condiciones para transformarse en serio animador de la generación que viene, no sólo sudamericana, sino mundial. Ayer, el pibe de 18 años logró su victoria más importante, en cuanto a la calidad del adversario se refiere: bajó al chiprota Marcos Baghdatis, 18º del ranking ATP, ex top ten y finalista de Australia 2006. El triunfo por 6-2, 5-7 y 6-0 lo metió en la tercera ronda del Masters Series de Miami, donde mañana se enfrentará ante otro duro como el ruso Mikhail Youzhny (17º), que ya debe estar tomando precauciones para poder detener al tandilense de 1,96 metro, que cuando juega como ayer, demuestra que el mote de promesa comienza a quedarle chico. Del Potro es realidad y su tenis no tiene techo.
Cuando aparece un prodigio como Del Potro, con un revés a dos manos que hace destrozos y un saque que si funciona resulta muy difícil de leer, los rivales comienzan a tomar recaudos y a implorar por no cruzárselo en una instancia prematura. Su ranking (63º), en ascenso, no representa su verdadero nivel, de top 30. Por eso es común que tenga que enfrentarse con tipos de fuste. Le pasó en Australia, donde casi elimina a Fernando González (actual Nº 5), a la postre finalista. También ocurrió hace una semana en Indian Wells, cuando le dio pelea a Richard Gasquet (16º). Esta vez, el escollo fue Baghdatis, de gran 2006 y desparejo 2007. Había olor a batacazo. Y se concretó.
Lo que sorprende fue la manera en que Del Potro se deshizo del chipriota. Lo superó con amplitud en el primer set, en el que aprovechó su gran comienzo, con una ventaja de 4-1. En el segundo venía encaminado hasta el 2-1, cuando la lluvia interrumpió el partido por unos minutos. "Me desconcentré un poco ahí, es la primera vez que me pasa algo así", contó el tandilense tras su triunfo. Se notó: Baghdatis impuso su presencia y se llevó un set cerrado. Podría haber significado un quiebre para un chico tan joven, pero fue todo lo contrario: Del Potro aplastó al chipriota y lo dejó en cero. Resultado inusual para un jugador ubicado en el top 20. Hasta a Federer le costaría lograrlo.
Si bien su épica victoria sobre Jurgen Melzer en la Davis ante Austria significa más en lo emotivo, este golpe es el mejor en su carrera. El lo sabe: "Fue increíble, es mi primera victoria ante un top 20", contó, extasiado. Además, explicó qué hizo para recuperarse de la pérdida del segundo set: "Sólo hice mi juego y no lo dejé hacer el suyo".
Definición simple, como su tenis, por la facilidad con que lo ejecuta. Viene Youzhny, pero en la mira aparece Nadal (posible rival en octavos), que ayer venció a Ricardo Mello. Estudioso al extremo, Rafa ya debe pensar en cómo contrarrestar tanto talento.
24.3.07
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