Nalbandian fue desplazado al undécimo puesto. Sigue en los primeros planos pero el golpe se sintió en el tenis de nuestro país. ¿Habrá recambio para la “legión de oro”?
David Nalbandian es el jugador argentino más brillante en las últimas dos décadas. Pese a no haber ganado ningún torneo de Grand Slam, se mantuvo en el último lustro en los primeros puestos del ranking en forma ininterrumpida.
En el último Masters Series de Indian Wells cayó en octavos de final ante el croeta Ivan Ljubicic, uno de los mejores jugadores del circuito, a quien siempre le resultó difícil vencer.
Sin embargo, al perder esta semana su condición de top ten, el “Gran David”, que tuvo su gran momento de gloria hace sólo 15 meses cuando derrotó a Roger Federer en la final del Master de Shangai, fue un golpe, al menos para el orgullo argentino en uno de los deportes que tiene al país como protagonista.
Hace pocos años, Nalbandian supo ser acompañado en los puestos de privilegio por Guillermo Coria y Gastón Gaudio -dos jugadores con distintos niveles de declive- y durante menos tiempo por Guillermo Cañas y Mariano Puerta, ambos relegados por suspensiones suspensiones por dóping, aunque en el segundo caso ya regresado al circuito y en espectacular recuperación.
Pese a que Nalbandian aún posee la juventud para seguir en la elite y recuperar la parte de su brillante juego que parece ausente, que Guillermo Cañas, quien ya está cerca de los 30 años, parece haberse recuperado plenamente de su suspensión y hasta se dio el lujo de demostrar que su juego puede ser letal para el mejor jugador del mundo, hoy por hoy no son grandes las perspectivas argentinas para pelear en los primeros puestos en el deporte blanco.
Además de Cañas y Nalbandian, siguen siendo potenciales candidatos Juan Martín del Potro, la mayor promesa argentina que ya mostró que puede ser una realidad, Juan Ignacio Chela, que parece haber recuperado el nivel que le permitió estar cómodo entre los mejores 20 por varios meses y es top ten (10) en la carrera de campeones, y José Acasuso, un jugador reconocido como peligroso en todo el circuito, pero que aún no pudo exhibir la regularidad necesaria.
También pueden anotarse en la lista, Juan Mónaco con el buen momento demostrado en la gira latinoamericana, donde logró consagrarse en Buenos Aires, y Agustín Calleri, siempre vigente, pero con la contra de que ya viene avisando que está dando sus últimos pasos en el tenis profesional.
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