El alboroto que generó su victoria ante Lleyton Hewitt era cosa del pasado. Dos días más tarde, Juan Ignacio Chela tenía que olvidarse del partido de su vida y afrontar otro, en circunstancias diferentes. El belga Kristof Vliegen, 84ø del ranking, pegador descontrolado, no presentaba antecedentes serios para complicar al Flaco. Así sucedió, Chela fue una pared desde la base, paciente y sólido, no dio opciones y festejó con un 6-1, 6-4 y 6-4. Como ante el escocés Andrew Murray en primera, no perdió el servicio. La mala de la noche fue la caída de Guillermo Coria ante el francés Sebastien Grosjean por 6-2, 6-2, 3-6 y 6-4, con la friolera de 23 doble faltas por parte del argentino.
Chela tardó sólo 20 minutos en llevarse el primer set: ganó 25 sobre 35 puntos posibles, hizo cinco winners y cometió nada más que cuatro errores no forzados. El segundo tuvo mayor paridad, pero Chela quebró rápido y supo mantener la ventaja hasta el final. Con los primeros sets en el bolsillo, todo indicaba que el de Ciudad Evita liquidaría rápidamente su compromiso de la tercera ronda. Y la lógica se cumplió nuevamente: pese a sufrir un poco en los primeros games, se afianzó, quebró en el séptimo game y escribió otra victoria convincente (16 errores contra 44 del rival) y rápida ante un gigante de 1,93 metro, de saque muy potente. El Flaco se metió por tercera vez en la segunda semana de un Grand Slam: antes había llegado a cuartos en Roland Garros 2004 y a octavos en el US Open 2002.
Su próximo rival se conocía esta madrugada, en el choque entre el alemán Nicolas Kiefer y el español Juan Carlos Ferrero. Nada es imposible, debe pensar Chela con razón, y la ilusión de una semifinal ante el gran Federer se mantiene intacta. Más teniendo en cuenta la caída del Mago, quien llegaba con un cuadro favorable. Con una molestia ampolla en el dedo mayor de la mano izquierda, Coria no pudo remontar un 0-2 en sets por segunda vez en su carrera. Por primera vez desde Wimbledon 2004, el Mago se marcha antes de la segunda semana en un Grand Slam. Punzante con la devolución de drive, anoche comenzó quebrando y quedó 2-0 rápidamente, pero perdió ocho games seguidos. En ese momento penaba con su saque: cuando le entraba el segundo, el francés (semifinalista 2001, 28ø del ranking y ex top ten) aprovechaba y lastimaba de drive. La ampolla frenó la reacción del santafesino, aun a pesar de los tres games seguidos que ganó al final. Con su servicio en 5-4, Grosjean no perdonó, y enfrentará a su compatriota Mathieu. Coria se pondrá a pensar en la Davis.
21.1.06
Uno por arriba
Chela llegó por primera vez a la segunda semana en Melbourne: superó al belga Vliegen y avanzó a octavos. En cambio, el Mago Coria cometió 23 doble faltas y cayó ante el francés Grosjean.
El alboroto que generó su victoria ante Lleyton Hewitt era cosa del pasado. Dos días más tarde, Juan Ignacio Chela tenía que olvidarse del partido de su vida y afrontar otro, en circunstancias diferentes. El belga Kristof Vliegen, 84ø del ranking, pegador descontrolado, no presentaba antecedentes serios para complicar al Flaco. Así sucedió, Chela fue una pared desde la base, paciente y sólido, no dio opciones y festejó con un 6-1, 6-4 y 6-4. Como ante el escocés Andrew Murray en primera, no perdió el servicio. La mala de la noche fue la caída de Guillermo Coria ante el francés Sebastien Grosjean por 6-2, 6-2, 3-6 y 6-4, con la friolera de 23 doble faltas por parte del argentino.
Chela tardó sólo 20 minutos en llevarse el primer set: ganó 25 sobre 35 puntos posibles, hizo cinco winners y cometió nada más que cuatro errores no forzados. El segundo tuvo mayor paridad, pero Chela quebró rápido y supo mantener la ventaja hasta el final. Con los primeros sets en el bolsillo, todo indicaba que el de Ciudad Evita liquidaría rápidamente su compromiso de la tercera ronda. Y la lógica se cumplió nuevamente: pese a sufrir un poco en los primeros games, se afianzó, quebró en el séptimo game y escribió otra victoria convincente (16 errores contra 44 del rival) y rápida ante un gigante de 1,93 metro, de saque muy potente. El Flaco se metió por tercera vez en la segunda semana de un Grand Slam: antes había llegado a cuartos en Roland Garros 2004 y a octavos en el US Open 2002.
Su próximo rival se conocía esta madrugada, en el choque entre el alemán Nicolas Kiefer y el español Juan Carlos Ferrero. Nada es imposible, debe pensar Chela con razón, y la ilusión de una semifinal ante el gran Federer se mantiene intacta. Más teniendo en cuenta la caída del Mago, quien llegaba con un cuadro favorable. Con una molestia ampolla en el dedo mayor de la mano izquierda, Coria no pudo remontar un 0-2 en sets por segunda vez en su carrera. Por primera vez desde Wimbledon 2004, el Mago se marcha antes de la segunda semana en un Grand Slam. Punzante con la devolución de drive, anoche comenzó quebrando y quedó 2-0 rápidamente, pero perdió ocho games seguidos. En ese momento penaba con su saque: cuando le entraba el segundo, el francés (semifinalista 2001, 28ø del ranking y ex top ten) aprovechaba y lastimaba de drive. La ampolla frenó la reacción del santafesino, aun a pesar de los tres games seguidos que ganó al final. Con su servicio en 5-4, Grosjean no perdonó, y enfrentará a su compatriota Mathieu. Coria se pondrá a pensar en la Davis.
El alboroto que generó su victoria ante Lleyton Hewitt era cosa del pasado. Dos días más tarde, Juan Ignacio Chela tenía que olvidarse del partido de su vida y afrontar otro, en circunstancias diferentes. El belga Kristof Vliegen, 84ø del ranking, pegador descontrolado, no presentaba antecedentes serios para complicar al Flaco. Así sucedió, Chela fue una pared desde la base, paciente y sólido, no dio opciones y festejó con un 6-1, 6-4 y 6-4. Como ante el escocés Andrew Murray en primera, no perdió el servicio. La mala de la noche fue la caída de Guillermo Coria ante el francés Sebastien Grosjean por 6-2, 6-2, 3-6 y 6-4, con la friolera de 23 doble faltas por parte del argentino.
Chela tardó sólo 20 minutos en llevarse el primer set: ganó 25 sobre 35 puntos posibles, hizo cinco winners y cometió nada más que cuatro errores no forzados. El segundo tuvo mayor paridad, pero Chela quebró rápido y supo mantener la ventaja hasta el final. Con los primeros sets en el bolsillo, todo indicaba que el de Ciudad Evita liquidaría rápidamente su compromiso de la tercera ronda. Y la lógica se cumplió nuevamente: pese a sufrir un poco en los primeros games, se afianzó, quebró en el séptimo game y escribió otra victoria convincente (16 errores contra 44 del rival) y rápida ante un gigante de 1,93 metro, de saque muy potente. El Flaco se metió por tercera vez en la segunda semana de un Grand Slam: antes había llegado a cuartos en Roland Garros 2004 y a octavos en el US Open 2002.
Su próximo rival se conocía esta madrugada, en el choque entre el alemán Nicolas Kiefer y el español Juan Carlos Ferrero. Nada es imposible, debe pensar Chela con razón, y la ilusión de una semifinal ante el gran Federer se mantiene intacta. Más teniendo en cuenta la caída del Mago, quien llegaba con un cuadro favorable. Con una molestia ampolla en el dedo mayor de la mano izquierda, Coria no pudo remontar un 0-2 en sets por segunda vez en su carrera. Por primera vez desde Wimbledon 2004, el Mago se marcha antes de la segunda semana en un Grand Slam. Punzante con la devolución de drive, anoche comenzó quebrando y quedó 2-0 rápidamente, pero perdió ocho games seguidos. En ese momento penaba con su saque: cuando le entraba el segundo, el francés (semifinalista 2001, 28ø del ranking y ex top ten) aprovechaba y lastimaba de drive. La ampolla frenó la reacción del santafesino, aun a pesar de los tres games seguidos que ganó al final. Con su servicio en 5-4, Grosjean no perdonó, y enfrentará a su compatriota Mathieu. Coria se pondrá a pensar en la Davis.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario