El argentino Juan Ignacio Chela cayó en sets corridos (7-6 y 6-4) con el peruano Luis Horna en la final del torneo de Acapulco y no pudo quedarse con el cuarto título de su carrera como singlista en el circuito ATP. Fue el primero para el peruano.
Como en los dos sets ante el español Almagro, en el partido de semis, Chela logró quebrar el servicio de su rival en el game inicial. Infalible desde su saque, rápidamente se colocó 2-0 arriba. Sin embargo, Horna consiguió levantar enseguida la desventaja con un quiebre que fue ayudado por tres errores no forzados del argentino y dejó las cosas 2-2. Luego de dos juegos sin errores de los sacadores, el Flaco sacó pecho en el peleado séptimo game y fue a sacar con el marcador 4-3 en su favor.
Pero volvió a fallar Chela. No pudo aprovechar el quiebre y el que sí aprovechó la situación para volver a igualar fue Horna. El peruano luchó, se puso 4-4 y cerró el noveno game con dos aces para pasar al frente por primera vez en el partido. Y, sorpresivo o no, al Flaco de Ciudad Evita le costó bastante llegar a un 5-5. Para muchos imprevisto, tal vez, pero el suspenso se instalaba decididamente sobre el polvo de ladrillo mexicano.
A esa altura, cada game era una batalla aparte y poder quebrar era un poco más difícil a medida que pasaban los puntos. Así fue que el peruano levantó un 15-40 en contra (oportunidad inmejorable para Chela) y defendió su saque con uñas y dientes. Ya 6-5 arriba, fue a todo o nada por un quiebre que le permitiera alzarse con el set inicial. Pero el argentino volvió a hacerse fuerte y forzó el tie break. En la definición, Horna estuvo más sólido y después de perder dos puntos para set estando 6-3 arriba, consiguió el séptimo punto para quedarse con el tie break por 7-5. ¿El parcial? También a su favor, claro, pero por 7-6.
Ahora, toda la presión caía sobre Chela. Estaba obligado a llevarse el set. Y todo transcurrió con absoluta normalidad hasta el quinto juego, en el que Horna, ya afianzado y superior al argentino, volvió a obtener un quiebre fundamental. Se puso 3-2 arriba y fue a sacar para comenzar a encaminarse hacia el título. Lo confirmó con gran autoridad y quedó 4-2. El resto fue mantenerlo para el peruano, que llegó al 6-4 definitivo y, con suma justicia y merecimiento total, consiguió el primer título de su carrera profesional.
De esta forma, el peruano El historial entre ambos favorece al Flaco de Ciudad Evita, que se impuso en tres de las cuatro ocasiones que se enfrentaron, incluyendo un triunfo en esta temporada, en el Abierto de Buenos Aires.
5.3.06
Flaco al horno
Chela cayó claramente con Luis Horna por 7-6 y 6-4 y no pudo festejar en el torneo mexicano que se jugó sobre polvo de ladrillo. Fue el primer título en la carrera profesional del peruano.
El argentino Juan Ignacio Chela cayó en sets corridos (7-6 y 6-4) con el peruano Luis Horna en la final del torneo de Acapulco y no pudo quedarse con el cuarto título de su carrera como singlista en el circuito ATP. Fue el primero para el peruano.
Como en los dos sets ante el español Almagro, en el partido de semis, Chela logró quebrar el servicio de su rival en el game inicial. Infalible desde su saque, rápidamente se colocó 2-0 arriba. Sin embargo, Horna consiguió levantar enseguida la desventaja con un quiebre que fue ayudado por tres errores no forzados del argentino y dejó las cosas 2-2. Luego de dos juegos sin errores de los sacadores, el Flaco sacó pecho en el peleado séptimo game y fue a sacar con el marcador 4-3 en su favor.
Pero volvió a fallar Chela. No pudo aprovechar el quiebre y el que sí aprovechó la situación para volver a igualar fue Horna. El peruano luchó, se puso 4-4 y cerró el noveno game con dos aces para pasar al frente por primera vez en el partido. Y, sorpresivo o no, al Flaco de Ciudad Evita le costó bastante llegar a un 5-5. Para muchos imprevisto, tal vez, pero el suspenso se instalaba decididamente sobre el polvo de ladrillo mexicano.
A esa altura, cada game era una batalla aparte y poder quebrar era un poco más difícil a medida que pasaban los puntos. Así fue que el peruano levantó un 15-40 en contra (oportunidad inmejorable para Chela) y defendió su saque con uñas y dientes. Ya 6-5 arriba, fue a todo o nada por un quiebre que le permitiera alzarse con el set inicial. Pero el argentino volvió a hacerse fuerte y forzó el tie break. En la definición, Horna estuvo más sólido y después de perder dos puntos para set estando 6-3 arriba, consiguió el séptimo punto para quedarse con el tie break por 7-5. ¿El parcial? También a su favor, claro, pero por 7-6.
Ahora, toda la presión caía sobre Chela. Estaba obligado a llevarse el set. Y todo transcurrió con absoluta normalidad hasta el quinto juego, en el que Horna, ya afianzado y superior al argentino, volvió a obtener un quiebre fundamental. Se puso 3-2 arriba y fue a sacar para comenzar a encaminarse hacia el título. Lo confirmó con gran autoridad y quedó 4-2. El resto fue mantenerlo para el peruano, que llegó al 6-4 definitivo y, con suma justicia y merecimiento total, consiguió el primer título de su carrera profesional.
De esta forma, el peruano El historial entre ambos favorece al Flaco de Ciudad Evita, que se impuso en tres de las cuatro ocasiones que se enfrentaron, incluyendo un triunfo en esta temporada, en el Abierto de Buenos Aires.
El argentino Juan Ignacio Chela cayó en sets corridos (7-6 y 6-4) con el peruano Luis Horna en la final del torneo de Acapulco y no pudo quedarse con el cuarto título de su carrera como singlista en el circuito ATP. Fue el primero para el peruano.
Como en los dos sets ante el español Almagro, en el partido de semis, Chela logró quebrar el servicio de su rival en el game inicial. Infalible desde su saque, rápidamente se colocó 2-0 arriba. Sin embargo, Horna consiguió levantar enseguida la desventaja con un quiebre que fue ayudado por tres errores no forzados del argentino y dejó las cosas 2-2. Luego de dos juegos sin errores de los sacadores, el Flaco sacó pecho en el peleado séptimo game y fue a sacar con el marcador 4-3 en su favor.
Pero volvió a fallar Chela. No pudo aprovechar el quiebre y el que sí aprovechó la situación para volver a igualar fue Horna. El peruano luchó, se puso 4-4 y cerró el noveno game con dos aces para pasar al frente por primera vez en el partido. Y, sorpresivo o no, al Flaco de Ciudad Evita le costó bastante llegar a un 5-5. Para muchos imprevisto, tal vez, pero el suspenso se instalaba decididamente sobre el polvo de ladrillo mexicano.
A esa altura, cada game era una batalla aparte y poder quebrar era un poco más difícil a medida que pasaban los puntos. Así fue que el peruano levantó un 15-40 en contra (oportunidad inmejorable para Chela) y defendió su saque con uñas y dientes. Ya 6-5 arriba, fue a todo o nada por un quiebre que le permitiera alzarse con el set inicial. Pero el argentino volvió a hacerse fuerte y forzó el tie break. En la definición, Horna estuvo más sólido y después de perder dos puntos para set estando 6-3 arriba, consiguió el séptimo punto para quedarse con el tie break por 7-5. ¿El parcial? También a su favor, claro, pero por 7-6.
Ahora, toda la presión caía sobre Chela. Estaba obligado a llevarse el set. Y todo transcurrió con absoluta normalidad hasta el quinto juego, en el que Horna, ya afianzado y superior al argentino, volvió a obtener un quiebre fundamental. Se puso 3-2 arriba y fue a sacar para comenzar a encaminarse hacia el título. Lo confirmó con gran autoridad y quedó 4-2. El resto fue mantenerlo para el peruano, que llegó al 6-4 definitivo y, con suma justicia y merecimiento total, consiguió el primer título de su carrera profesional.
De esta forma, el peruano El historial entre ambos favorece al Flaco de Ciudad Evita, que se impuso en tres de las cuatro ocasiones que se enfrentaron, incluyendo un triunfo en esta temporada, en el Abierto de Buenos Aires.
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