La esperanza de Puerta

El tenista tiene tres semanas para apelar ante la Corte Arbitral del Deporte. Allí podría conseguir al menos una reducción de la pena. Un especialista le explicó a Infobae.com cuáles son los pasos a seguir por la defensa y las chances que tiene el jugador Mariano Puerta tiene tres semanas para apelar ante la Corte Arbitral del Deporte (CAS) la suspensión de ocho años que le aplicó el Tribunal Independiente Antidoping de la FIT. La esperanza del cordobés será conseguir en esa instancia que al menos se le reduzca la pena, aunque para que eso ocurra deberá ser convincente en algunas explicaciones. El fallo que dispuso el castigo invitó a Puerta a realizar la apelación ante la CAS para dirimir su situación. ¿Por qué? Es que el tribunal se debe ajustar a las normas de la Agencia Mundial Antidopaje (WADA), que impone una pena mínima de ocho años para un caso de reincidencia, un límite que sí podría ser modificado en la siguiente instancia, es decir la CAS, a la que ahora llegará el tenista. La estrategia estará en manos del abogado del tenista y ex ministro de la Corte Suprema de Justicia, Eduardo Moliné O’Connor, quien justamente es uno de los árbitros de la CAS, que, por supuesto, no intervendrá como tal en este caso sino como defensor del cordobés. El abogado Mariano Clariá, subdirector del portal jurídico ElDial.com y especialista en derecho deportivo, explicó en diálogo con Infobae.com que “la única esperanza que se le abre a Puerta es que si ante la Corte demuestra que no hubo culpa grave se pueda bajar la pena a menos de ocho años”. El criterio aplicado por el tribunal para determinar el castigo fue el siguiente: “En primer lugar -aseguró Clariá- el jugador debía demostrar cómo ingresó la etilefrina en su cuerpo. Y esto Puerta lo logró con la explicación del vaso de su mujer. En segundo término, debía demostrar que no tuvo ninguna culpa en ello, que no fue negligente. Y ahí Puerta no lo consiguió. El tribunal le dijo: ‘Debiste haber tomado las precauciones para que esas sustancias no ingresen a tu cuerpo’”. De esa manera, una pena que tendría que haber sido de por vida –por ser reincidente- fue por ocho años. Es decir, mucho menor. Pero como se trata de la sanción mínima que prevén las reglas de la WADA, el tribunal independiente de la FIT no está capacitado para reducirlas a su criterio. En otras palabras, el tenista cordobés consiguió una reducción de pena hasta el mínimo de lo que prevé el Código. ¿Cuál es la esperanza en la apelación? Que hay precedentes de la Corte Arbitral del Deporte en los que se apartó de ese límite, por lo que ahí Puerta tiene su oportunidad de conseguir una disminución mayor del castigo. Las chances son mínimas, pero Puerta no pierde las esperanzas. Será la único que se mantiene cuando el final de una carrera está tan cerca.